Ivan Lo Giudice
Uno de los sectores que más atrae a los turistas a viajar a Sicilia es su gastronomía. De hecho el turismo gastronómico en Sicilia tiene un peso importante en la decisión de viajar a Sicilia por parte de los potenciales turistas.
En este artículo os describiré uno de los postres típicos de Sicilia: La cassata siciliana.
Los orígenes de la cassata siciliana están relacionadas con la dominación árabe en Sicilia (siglos IX-XI). Los árabes habían traído a Palermo la caña de azúcar, limón, lima, naranja amarga, mandarina y almendras. Añadiendo a estos ingredientes el queso, que se producía en Sicilia desde tiempos prehistóricos, se obtuvieron todos los ingredientes básicos de la cassata siciliana, que al principio era nada más que una cáscara de pasteles rellenos de queso ricotta endulzada y luego horneada.
En la época normanda, en Palermo en el convento de Martorana, fue creado el mazapán o Martorana, una mezcla de almendras molidas y azúcar, colorada de verde gracias a los extractos de hierbas, que reemplazó la cáscara original de los pasteles. Se pasó entonces desde la cassata al horno a la cassata siciliana fría.
Los españoles introdujeron en Sicilia el chocolate y el bizcocho. Durante el barroco, se añadió también la fruta confitada.
En principio, la cassata siciliana era considerado como un producto relacionado con la repostería tradicional de las monjas y se solía comer durante la Semana Santa. Un documento oficial del primer sínodo de los obispos sicilianos en Mazara del Vallo en 1575 establece que la cassata es «esencial durante las fiestas». Un proverbio siciliano dice que «Tintu è cu nun mancia a cassata a matina ri Pasqua» («Ha de considerarse malo el que no se come la cassata siciliana la mañana de Semana Santa»). La característica decoración de la cassata siciliana con la calabaza se introdujo en 1873 (con motivo de un evento que tuvo lugar en Viena) por el chef pastelero Palermo cav. Salvatore Gulì, que tenía una pastelería en el centro de Corso Vittorio Emanuele en Palermo.
Ingredientes Cassata Siciliana:
Una cassata siciliana (en árabe qas’at, ‘bol’) es una tarta tradicional de la cocina siciliana a base de ricotta, azúcar, bizcocho, mazapán, fruta confitada y azúcar glas. A pesar de ser una receta simple, existen numerosas variantes locales, especialmente en su aspecto exterior debido a variantes de estilo en la decoración de este dulce. Algunos de los ingredientes pueden ser pistachos, piñones, chocolate, canela, marrasquino o aroma de azahar.
El término cassata en la lengua italiana también se refiere a un tipo de postre helado proveniente de Nápoles conocido en español como «helado napolitano».